(1139, territorio castellano) El edificio responde al tipo más humilde de iglesia románica. Con nave única y ábside semicircular, desarrolla un esquema compositivo propio de la época que estamos estudiando: tres calles delimitadas por columnillas con capiteles de decoración vegetal y con tres ventanales de arco de medio punto. Su colección de canecillos sorprende por su temática profana, que pretende llamar la atención del viandante; entre ellos aparecen los recurrentes temas vegetales, cabezas de animales, humanas, también diablescas y la representación de dos juglares tocando instrumentos musicales o un saltimbanqui. ¡Encuéntralos! En esta iglesia debemos situar una de las esculturas románicas más importantes de la dudad, el .Cristo de la Zarza". Según cuenta la leyenda, su nombre guarda relación con el milagroso descubrimiento de la propia talla... ¡Investiga y conocerás por qué! Además... también deberías saber quiénes eran "las emparedadas", ¡descúbrelo porque te sorprenderá!
IGLESIA DE SAN MARCOS
(1178, territorio castellano) Conocida durante siglos como Real Clerecía de San Marcos, por ser nombrada Capilla Real dependiente de la Corona de Castilla y León, hasta que, en el siglo XVIII, tras la expulsión de los jesuitas, Carlos III otorgó como nueva sede de misas y oficios de difuntos por los reyes de España la iglesia que en la actualidad conocemos como La Clerecía: la Real Clerecía del Espíritu Santo. El rasgo que mejor define su originalidad es su planimetría... totalmente circular al exterior, sin desenmascarar la verdadera planta interior de tres naves y ábsides semicirculares.
IGLESIA DE SAN MARTÍN
Fundado en 1617 bajo este nombre. Sin embargo, a partir de 1779 fue llamado Real Seminario de San Carlos, y desde 1940 es conocido como la sede de la Universidad Pontificia; eso en cuanto al colegio, porque si hablamos del templo tendríamos que decir que también se denominó Real Clerecía de San Marcos en 1767, tras la expulsión de los jesuitas y que, de éste, viene su nombre actual. Cuenta, por tanto, con dos partes claramente diferenciadas, a las que si añadimos una tercera (la inicial residencia de los jesuitas situada en la parte de atrás del templo), hacen en total un conjunto grandioso de casi 20.000 metros cuadrados.
Del exterior destacar sus tres portadas, de las cuales, la principal quedó cegada tras una reforma para evitar el deterioro que estaba sufriendo (búscala por la parte exterior convertida ahora en ventana y admírala desde el interior pidiendo permiso previamente); la segunda de las puertas subió tantas reconstrucciones que ahora deberíamos estudiarla en el Renacimiento y, por último, en la tercera debes repasar muchos de los elementos románicos que ya has aprendido: el arco de medio punto, el conjunto de arquivoltas que nos permite descubrir el gran grosor del muro, sus diferentes decoraciones, las columnas sobre las que reposan, en las que podemos ver fácilmente la basa, el fuste y capitel... Antes de marcharte observa el grupo escultórico que la decora... supuso un gran avance para la época, ¡adivina por qué!...
IGLESIA DE LOS SANTOS JULIÁN Y BASILISA
Fundado en 1617 bajo este nombre. Sin embargo, a partir de 1779 fue llamado Real Seminario de San Carlos, y desde 1940 es conocido como la sede de la Universidad Pontificia; eso en cuanto al colegio, porque si hablamos del templo tendríamos que decir que también se denominó Real Clerecía de San Marcos en 1767, tras la expulsión de los jesuitas y que, de éste, viene su nombre actual. Cuenta, por tanto, con dos partes claramente diferenciadas, a las que si añadimos una tercera (la inicial residencia de los jesuitas situada en la parte de atrás del templo), hacen en total un conjunto grandioso de casi 20.000 metros cuadrados.
IGLESIA DE SAN CRISTOBAL
(1145, territorio torés) Esta iglesia, ya desde el exterior, deja ver con nitidez su organización interna: planta de cruz latina aunque de nave única y bóveda de cuarto de esfera para el ábside. Debemos destacar su cornisa ajedrezada y, cómo no, sus canecillo, por ejemplo, en el ábside podemos ver una cabeza de jabalí, un águila, arpías, cruces o una persona con un tonel a su espalda. En el interior se custodia al "Cristo de los Carboneros", talla románica de de 1,92 m de alto con detalles propios del estilo, como sus cuatro clavos y la inexpresividad de dolor en el rostro, con ojos cerrados, serenos e impasibles.
SANTO TOMÁS CANTUARIENSE
(1175, territorio portogalés) El templo, dedicado a santo Tomás Becket, está construido con piedra arenisca. Tiene un amplio crucero y, de cabecera, tres ábsides semicirculares escalonados. Fue proyectado en principio con un deseo de mayor monumentalidad, con tres naves, pero de nuevo las dificultades económicas obligaron a reducir la planimetría. En el exterior destaca la puerta principal, con arco de medio punto y con dos arquivoltas que descansan en columnas con capiteles decorados con tema vegetal. Busca los cantillos sobre los que descansa la cornisa, algunos con cabezas humanas, otros de animales y, la mayoría, ya de talla moderna. Observa los ábsides y sus ventanas ciegas con arcos de medio punto y el central con pilastras.
IGLESIA DE SAN POLO
(1108, territorio portogalés) Una de las curiosidades de esta iglesia es la desigual anchura que tenían sus tres naves interiores y, como podemos observar en los restos, el uso del ladrillo como material básico.
IGLESIA DE SANTIAGO
(1145, territorio mozárabe) Su restauración en 1957 la convirtió en la recreación perfecta de lo que fue la arquitectura religiosa mudéjar pero, en verdad, muy alejada de su aspecto original. Fue parroquia de los mozárabes, que siempre construían sus templos con el gusto románico aunque utilizando el ladrillo en lugar de la piedra.
SANTA MARÍA DE LA SEDE
(Catedral Vieja, 1152) La situaron en el territorio de los francos y, como era habitual en la época medieval, próxima a la muralla y a alguna de sus puertas, en este caso a la del Río (...¿Sabes cuántas puertas tuvo la muralla de Salamanca? ¿Permanece hoy en día el nombre de alguna?). Su aspecto era de fortaleza; había que estar preparado para la defensa de posibles ataques. Por ello podrás ver almenas, los muros de más de tres metros de grosor, las ventanas saeteras y las torres (aunque una nunca se terminó y la otra pasó a ser la de la Catedral Nueva). Toda la catedral está construida en piedra. Observa elementos que, efectivamente, nos dicen que se trata de un edificio románico: escasas dimensiones y altura, pobre decoración en sus muros exteriores, con las famosas marcas de cantería en algunas de sus piedras, el precioso "ajedrezado" que remarca las estrechas ventanas de los ábsides y los arcos de medio punto.Y, para excepción de todo ello... la maravillosa Torre del Gallo de influencia bizantina.
En el interior podrás observar la planta de cruz latina y los capiteles de las columnas de las naves, que son de una gran belleza. Fíjate en el Altar Mayor donde, dentro del retablo del siglo XV y, teniendo como autor a Dello Delli, está la Virgen de la Vega, una escultura románica muy querida por todos los salmantinos por ser su patrona. Ahora, para finalizar, busca alguna leyenda que hable de otra escultura románica importante, como es el Cristo de los Milagros y la famosa piedra que se desprendió de una de las bóvedas de la nave lateral derecha; o visita las capillas del Claustro para encontrar la de santa Bárbara: donde se realizaron los primeros exámenes cuando en Salamanca no existía el edificio de la Universidad.