Deberíamos comenzar señalando que se trata del edificio civil más importante de la época de los Reyes Católicos. Cuentan que tal edificio se concibió para celebrar las nupcias entre don Rodrigo Arias Maldonado, catedrático de la Universidad y embajador de los Reyes Católicos y doña María de Pimentel. En toda la fachada se puede adivinar el simbolismo amoroso, al estar representado en diferentes espacios "Cupido", el ángel del amor. La puerta aparece descentrada y perfectamente decorada (busca en el dintel delfines, leones...). Observa también la magnífica rejería de algunas de las ventanas de hierro forjado que resguardan la intimidad de los huecos más cercanos a la calle. Sin duda, llama la atención la originalidad de la decoración de más de trescientas conchas repartidas por el muro. No es sino porque D.Rodrigo era también caballero de la Orden de Santiago.
La desaparición de las conchas en la parte alta del edificio encuentra su explicación en el momento en que tiraron completamente una de las torres del palacio y la otra, la que vemos hoy en día, la desmocharon. Sin embargo, en tomo a la desaparición de conchas existe otra leyenda que tú mismo puedes investigar. Terminaré haciéndote mención del maravilloso patio que se encuentra en el interior. Entra y descubre las maravillosas gárgolas (quizá las mejores de la ciudad por su conservación), los escudos (los de aquí y, también en la fachada, haciendo alusión a las familias que ordenaron la construcción de la casa: los Maldonado y los Pimentel), la balaustrada del piso superior, los "arcos salmantinos" del inferior... Hoy en día es la sede de una de las bibliotecas más importantes de la ciudad.